Últimamente me estoy luciendo con las películas que elijo. Ya no sé si es por masoquismo o porque parece que esté buscando una excusa para aborrecer el séptimo arte. En cualquier caso, este es el segundo bodrio que me trago en un corto periodo de tiempo.

Desde un principio, aquellos que la vieron antes que yo tenían una opinión unánime: la película es una mierda pinchada en un palo. Y después de haberla visto yo, ¿Sabéis a qué conclusión he llegado? Pues a la de que razón no les falta, desde luego.

Quizás no llegue a los extremos de truñaco a los que llega la última de Resident Evil, pero tampoco se queda atrás. Y, en honor a la verdad, es una pena, ya que la película apunta maneras; los primeros 5-10 minutos hasta dan la sensación de que estamos ante la que puede ser una buena película de acción. Pero no es así…

Acción trepidante a cachos, una invasión extraterrestre que podía haber dado más de sí, intervenciones de los militares que brillan por su ausencia hasta casi el final de la película y un ritmo que no le hace justicia. Si encima de eso le añadimos un final que no dice nada, ya tenemos la fórmula perfecta para malgastar 90 minutos de nuestro valioso (y a veces escaso) tiempo.

¿Algo bueno? Los efectos especiales, algunos planos bastante bien logrados y la presencia de David Zayas, más conocido por su papel del detective Batista en la serie Dexter. Destacable también uno de los pocos momentos cómicos del filme protagonizado por su personaje.

Skyline, es por tanto, un filme de invasiones extraterrestres que nos deja con un sabor de boca agridulce, a medias, mal desarrollado, y que podía haber dado más de sí. Pero todo esto, como ya sabréis, sólo es mi humilde opinión…