Cómo se nota que la época de exámenes se acerca. De lo contrario esta entrada estaría fuera de lugar. Aun así… sigue sin tener lógica… ¿o puede que sí?

Estas cosas surgen cuando llevas mucho tiempo estudiando… es ese otro yo que empieza a decir chorradas e intenta calmarse haciendo bromas. Y todo por culpa de ella: la tabla periódica.

La foto os suena ¿verdad? Claro, todo el mundo, en algún momento de su vida ha tenido la asignatura de química pero a estas alturas puede que hasta tengan olvidado quién la «inventó» (la tabla que no la química X-D). Para otros (como es mi caso) se trata del pan nuestro de cada día.

Y como estudiante de ciencias químicas, sufro con ella. ¿Por qué? Porque a cierta profesora de química inorgánica, esa asignatura fascinante de la que nadie y digo NADIE se pierde una clase (**ironía**) no se le ocurre nada mejor que hacérnosla aprender de memoria, ¡¡de MEMORIA!! By heart.

Pues… yo ya me la sé ;-P. Por suerte, los actínidos, lantánidos y sintéticos no cuentan. No, no, no, no. Sólo todos los demás.

Por suerte, las idas de pinza a veces ayudan mucho. De esa forma aprendértela construyendo frases (que no tienen por qué tener sentido) es mucho más fácil y más llevadero para todo ese tostón. Así, pueden llegar a aparecer zampakoutôs, Benitos pervertidos, ciudades que tienen cromos robados… hasta la cantante Rihanna.

Ahora sólo queda aprenderse las propiedades de cada elemento casi nada.

Sin más, que como hace poco me «di a conocer» un poquito más comentando lo que estudio y tal, pues para que vayáis viendo qué es lo que se estudia en dicha carrera… y así motivaros o no a que la estudiéis.

Yo sólo digo que: «Carlos sigue sin pibe»… a ver quién acierta qué elementos aparecen en esa frase. Fácil… ¿o no?

¡¡Saludetes!! 😉